SEGUIR, TAN SOLO ESO

¿Cómo se vuelve a divisar la normalidad y que la razón deje de soñar? ¿O es completamente al revés? Quizás ninguna de las dos, tampoco la que imaginas, pero tampoco la que pueda decir ese, aquella, tú o la que pueda decir yo, porque como dijo Pessoa «…no soy nada, nunca seré nada, no puedo querer ser nada ni quiero ser nada…»
Pero ciertamente, aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del mundo, y seguiré caminando.