Camino de Invierno – Silleda a Ponte Ulla

¡Buenos días, amigos! Nos levantamos mejor de cómo nos acostamos, recuperado y dispuesto a repetir otra vez todo el Camino. Lo que hace descansar bien a veces….

Tras desayunar muy bien donde me he alojado y he estado divinamente, salgo afuera y vaya ¡llueve, vaya que novedad jajajaja!! Pero no pasa nada, estoy bien sigo bien, así que seguimos por la travesía de Silleda, y casi al final de la misma me encuentro este mojón del Camino ahí encerradito el pobre, vamos, como para verlo si vas por la acera del otro lado de la travesía en vez de por esta, pero en fin…

Y nada más terminar la travesía y salir a la N-525, nuestra fiel compañera que ya nos acompaña desde hace varios días, una señal nos indica que nos desviemos a mano izquierda, así que como suelo decir, sigue las señales, pero conociendo donde me quiere meter esa señal de la última vez, en un trozo pequeño y estrecho de camino totalmente inoperante, salvaje y embarrado aunque no llueva en un mes, continuo tranquilamente por el arcén de la carretera, ya que en cincuenta metros si has tomado ese demencial trozo te devuelve otra vez a la carretera por donde voy yo. Ese juego senda-carretera vuelve a repetirse un par de veces más, y aunque llueve y voy por el arcén, lo prefiero a esos caminos que aún recuerdo de cuando pase, y eso que no llovía ni nada, y no termina hasta que llegamos junto a una empresa de fabricación de piensos llamada Nudesa. A ver, cuento, el Camino sigue completamente a la izquierda y bajamos una pista asfaltada para llegar a San Fiz, aldea de Margaride, pero después ese asfalto pasa a convertirse por un sendero arbolado y muy majo con el firme llenito de eso que ya sabemos con la que está cayendo. Después el recorrido nos lleva a cruzar un puente sobre el río Toxa y, poco después, a recuperar una pista asfaltada y luego de gravilla que nos acerca a la carretera N-525, forma de la que entramos en Bandeira, salvo que hayas preferido ir por el arcén de la carretera, Y repito, ambas posibilidades son opcionales y libres de elección, nada de seguir a nadie ni escoger porque alguien te lo diga, libres somos y escoger podemos en muchos aspectos de nuestra vida. Esta es una de las etapas de todos los caminos jacobeos en los que me vuelvo más anárquico –si, lo admito, lo soy bastante, es la verdad- ya que cuando la experiencia llama a tu mente pues hazle un poco de caso…

Hago un descanso en Bandeira para comer y beber algo, en la travesía tienen un sitio bastante majo donde te atienden bien, Cafetería Tapería Atly, y tras ello continuamos por la travesía y al final de ella, seguimos las señales y giramos hacia la derecha en una pronunciada bajada, al menos asfaltada…

…que nos irá llevando en unos kilómetros primero a la aldea de A Casela, después a la de Vilariño, que pasamos y continuamos luego por asfalto hasta Dornelas y su iglesia de San Martiño.


La Iglesia de San Martiño se ubica en el núcleo de Dornelas y es de origen románico, su portada cuenta con una arquivolta doble, diversos contrafuertes y numerosos elementos propios del románico rural gallego, y según está registrado, el terreno donde se emplaza el templo fue cedido por Doña Urraca a inicios del siglo XII. Enseguida y siguiendo las señales giraremos y avanzaremos ahora por un bonito tramo de dos kilómetros, rodeados de eucaliptos y pinos, y oye, oye, oye, a pesar de ser de tierra ¡no está encharcado ni embarrado!!.


Tras ello, tomamos una senda secundaria asfaltada local a mano izquierda, y la llamo senda porque antes era todo tierra, que seguiremos durante un par de kilómetros para girar a mano izquierda en un cruce y, en breve hacia la derecha, evitando desembocar en la cercana N-525. Aquí, la última vez, no estaba bien señalizado el lugar, y termine en la carretera, que continué por el arcén hasta Ponte Ulla. Esta vez si estaba correctamente señalizado, El tramo que viene a continuación es sin duda, si no ha llovido y está seco, uno de los mejores de la etapa, pero estando como estaba el tiempo, con fuertes lluvias, pues mojado, encharcado, embarrado y acompañado de molesto viento, así que os podéis imaginar jajajajajaja uno de los más peculiares caminando unos kilometrillos entre bellos pinos, altos eucaliptos y otros árboles mezclados, pero con un firme que vamos vamos, pero naaaa pelillos a la mar, que no voy a decir nada más del barrillo y todo eso, que es el Camino de Santiago y lo estamos disfrutando, pero hay que contar las cosillas.


Y tras ello viene la enorme y continua bajada XXX en mortal desnivel que con lluvia es toda una aventura…



y que nos lleva hasta las aldeas de O Seixo y Castro, hasta que finalmente, y tras cruzar el río Ulla, limite provincial con La Coruña, llegamos a la localidad de Ponte Ulla. El río Ulla forma la segunda cuenca más importante de la Comunidad Gallega y desemboca en la ría de Arosa tras un viaje de más de 130 kilómetros.


Antes de irme al alojamiento, visito la Iglesia de Santa María Magdalena, una pequeña preciosidad a la que no se le da el valor que tiene, y la misma se levantó sobre un templo del siglo VIII, del cual aún se conservan algunos elementos románicos, como son las gárgolas y el ábside. En la fachada sur destaca una capilla, del siglo XVI, con frescos en los que se representa en su arco una Anunciación pintada al fresco. En el templo también destaca la Cruz de Plata Dorada qué, según dicen, perteneció a la Iglesia de San Xoán da Cova. Es una pequeña iglesia, pero una pequeña joya con un gran contenido, conservada y respetada bastante bien en el tiempo, quizás por estar situada en un enclave de carreteras muy importante en el medievo.


Tras pasar junto a un mural que me gustó y del que logicamente hice una foto…


…voy a alojarme, me ducho y sin “repararme” mucho me acerco a comer al sitio de A Taberna de Cundian, un buen lugar donde te tratan bien y donde mientras me tomo una cervecita antes de comer ¡tatatachannnnn! me encuentro con Juan, el único peregrino con el que coincido en todo el Camino de Invierno, lo mismo que él me dice, que no ha visto a nadie.

Lógicamente nos hacemos una fotografía inmortalizando semejante hallazgo en un mes de enero en este Camino de Invierno. Me cuenta que él comenzó el Camino en Monforte, y que va a continuar para llegar hoy mismo a Santiago, ya que no tiene más días y debe volver al trabajo. No le entretengo más, así que tras charlar un pequeño ratillo sigue el Camino que seguramente si yo me hubiera encontrado al cien por cien le hubiera acompañado, ya sabéis que soy un correcaminos que le encanta doblar etapas ¡buen Camino siempre, Juan, Santiago te espera!!
Como más que divinamente un plato de churrasco, chorizo criollo, patatas para saltar un tren y una deliciosa ensalada que no me quiso decir la chica que era lo que le ponían, secreto de la casa dijo… y quizás para consuelo me invito al chupito de orujo. Luego a descansar, mañana más y mejor.



Y venga, ya sabéis, prohibido rendirse, respirar siempre bien profundo y para adelante. Cuidaros mucho, un abrazo, mucho ánimo y BUEN CAMINO SIEMPRE

Por fin un buen compañero peregrino!! Casi a la llegada jaja
Ya te digo, Francisco, un poco más y solico ¡Buen Camino siempre!
Vamossss, buen Camino siempre compañero peregrino
Siempre hacia adelante Bea ¡Buen Camino siempre!
Buen Camino 🌄🙏
¡Buen Camino siempre, Laura!
En nada estás en Santiago ya, mucho ánimo 🙏👏🏻
Gracias, Mercedes ¡Buen Camino siempre!
Vamos Fran que te queda muy poquito!!
Gracias; Juanvin ¡Buen Camino siempre!