Camino del Norte (preámbulo al Camino Lebaniego) – Santander a Santillana del Mar

Caminar, sentir, vivir entre la armonía y el equilibrio, con todo el desequilibrio pleno de los días felices y el total y pleno desequilibrio de los días grises y sin sabor, donde quizás todo lo que necesitas son las ganas de mar abierto o de cielo despejado, porque al final son las ganas las que nos guían para volver a saborear ese imposible sabor de los momentos interminables incapaces de olvidar…
Amanece un día esplendido, como todos lo son en el Camino de Santiago, haga sol, llueva, truene o nieve. Hoy, antes de salir de Santander y comenzar pronto a caminar, sin prisas como siempre, pues contemplaremos un ratito su catedral, dedicada a Nuestra Señora de la Asunción, que situada muy cerca del mar quizás sorprenda un poco a algunas personas por su aparente austeridad, en comparación con otras catedrales.


En sus primeros y remotos tiempos, dejando de lado que fue asentamiento romano en sus orígenes, en dicho lugar, que es llamado Cerro Somorrostro (summum rostrum, “promontorio mayor”) y donde se supone es donde nació la ciudad, ya se levantaba un monasterio en el siglo VIII, que posteriormente pasaría a ser la abadía de los Cuerpos Santos (en la catedral se guardan reliquias, entre otros santos, de san Emeterio y san Celedonio) y posteriormente colegiata en el XII, para ya en el XVIII obtener la distinción de catedral. La catedral en si está compuesta por dos plantas o iglesias superpuestas de estilo gótico, ambas del siglo XIII, lo que la hace realmente una catedral atípica formada por dos iglesias adosadas, aunque posteriormente ampliada y continuamente reformada su estructura arquitectónica.




A la parte de abajo la denominan la del Cristo. Toda la catedral, aunque en principio parezca que tiene aparente austeridad en comparación con otras catedrales, está profundamente decorada y merece la pena que la visites si tienes tiempo, ya que guarda muchas sorpresas en su interior que disfrutaras descubriéndolas, así que ánimo y a visitarla.
Y frente a la catedral pues ese cartelito informativo luminoso va desgranando segundo a segundo los días que restan para que se abra la Puerta del Perdón en el monasterio de Santo Toribio de Liébana, hacia donde se encaminaran mis pasos en breves días, salvo circunstancias.

Y bueno, amigos míos, podría hablaros largo rato de la catedral y de otros puntos de Santander, pero vámonos a la etapa, que es una de esas que no es que se haga larga y monótona, a ratitos lo es, pero es que aunque no le encuentras muchos ratos el puntito sigue siendo parte del Camino y eso le da la excusa por ello…

…pero la verdad es la realidad, así que solo es prepararte para caminar junto a las vías del tren, de las carreteras, por algún carril peatonal y por sitios a veces poco emblemáticos para recordar luego. Pero nada de pesimismo, una sonrisa y para adelante, que siempre hay algo bueno en lo malo y algo malo en lo bueno, así que es una de esas etapas donde ya que es casi de encefalograma plano, salvo en algunos buenos lugares, que los hay y puedo asegurarlo, pues a ponerte el auricular y aprovechar para enlazar pensamientos con los que escuchas, bien sea música, podcast o lo que sea, ya que poco canto de pajarillos ni rumores de naturaleza vas a conseguir oír. En definitiva, hay que hacer el recorrido y ya está, aunque siempre tienes la opción de coger –como hacen muchos- un tren o bus y desde Santander avanzar así 5, 10 o 15 kilómetros, salvando la salida de Santander y otros tramos igualmente poco satisfactorios, por lo que puedes coger el tren en Santander hasta Mogro y así evitaras la zona del polígono industrial y dar una absurda vuelta de 8 kms para sortear el río Pas y al mismo tiempo evitar que la etapa sea demasiado larga, o tomar el tren en Boo, que hacen muchos peregrinos, y así ir hasta Mogro, ante lo que no tengo absolutamente nada que objetar, porque todo es opcional y somos libres ¿no hay personas que toman el tren en Burgos –yo jamás de los jamases- y se van hasta León, diciendo que un tramo tan lleno de fuerza interior como es la meseta castellana «no les atrae”….? A mi me encanta ese tramo de la meseta castellana, jamás me lo he saltado ni saltaré, pero es como todo y lo respeto, pues eso, libres somos y en el Camino todos nos encontraremos, aunque para mi, ya puestos, una de las peores salidas que hay de una gran ciudad es la de León, que tiene una salida totalmente para olvidar, pero la he caminado muchas veces, pero el día que se me tuerza el diente pues autobús y hasta Astorga, que el Universo no nos va a fulminar por ello, porque lo que importa e importará siempre es lo que sientes y llevas en tu alma, el resto que me lo pongan en la cuenta y lo descuenten cuando llegue.
Y bueno, al Camino, que intentaré aligerar su recorrido, así que la cuestión para salir de Santander es prácticamente, aparte de ser una salida algo feota y larga como en casi todas las salidas de las grandes ciudades…

…un poquito aquí y allá de urbanizaciones, industrias, vías de tren, carreteras, cemento y asfalto con el agravante de la ausencia de flechas amarillas y señales, dirigirnos hacia la carretera N-611, con dirección hacia Torrelavega y Palencia, por donde caminaremos por un andadero un par de kilómetros hasta la localidad de Peñacastillo, después seguir hasta Santa Cruz de Bezana…

y en nada hasta Boo. Aquí en Boo podéis tomar como hacen muchos el trenecillo si deseáis avanzar un poco más cómodamente…

…yo la verdad me encontraba divinamente, así que desistí de ello y seguí caminando, que para eso he venido, y si lo deseas hasta en el eterno paisaje de un desierto encuentras belleza si estás dispuesto a verlo todo con ojos abiertos y no con cerrazón mental.


Continuamos hasta las localidades de Arce, Oruña y Mar, sin mucha diferencia entre unas y otras ni en sus distancias o cercanías o su paisaje, llegas a una y otra fácilmente y las vas dejando atrás, aunque entre Boo y Arce realmente tienes un interesante tramo junto al río Pas…

…que te puede ayudar a recargar un poquito esas pilas. Y oye, al llegar a Arce me entretuve contemplando la iglesia de Santa María…

ya que tiene historia y energía aunque lo que nuestros ojos contemplan ahora es una construcción en sillares del siglo XVIII, pero aquí estuvo enclavado el antiguo Monasterio de Santa María en el siglo IX, y cuando pasas las manos por alguna de sus pocas piedras más antiguas percibes pero muy claramente su antigua fuerza.
Y entre Oruña y Barreda fijaros bien en las escasas señales, no sea que os despistéis y aparezcáis en el quinto carajo, ya que es fácil por la notable ausencia de señales indicadoras, pero siempre sin problemas, ya sabéis, una sonrisa, un poco de arameo y para adelante ¡que estamos en el Camino!


Y cuando lleguéis a Mar, aparte de tomaros algo en alguno de sus bares, nos os perdáis la escultura que se encuentra en una rotonda, la llamada La Sirena de ojos turquesa…

…labrada en piedra en 2002 por el escultor Salvador García Ceballos. En algunos relatos de la mitología cantabra, se le considera benefactora a la sirena de ojos azules o turquesa, ya que ella avisaba a los marineros con sus cantos y el de su caracola, de la cercanía de los peligrosos acantilados en los días de espesa niebla y por la noche.
Y desde ahí pues para Requejada, Barreda y Viveda, tras lo cual tras llegar a esta última localidad ya apenas nos quedaran cinco kilometrillos para llegar a Santillana del Mar, un vistoso lugar bien cuidado y acogedor con su espíritu totalmente turístico.

Por supuesto no esperéis visitar las cuevas de Altamira, donde ya desde hace prácticamente décadas, puesto que en el 2002 se cerraron las visitas normales por el exceso de visitas humanas que puso en peligro las pinturas (por las oscilaciones de temperatura y humedad), se decidió restringir el acceso para su conservación y se está empleando un sistema de acceso a la cueva de Altamira por cita previa a través de lista de espera. Esta lista de espera está cerrada y de momento no se aceptan nuevas solicitudes, ya que el estricto régimen de acceso a la cueva es de cinco personas un día a la semana, por lo que si hoy te apuntaras en la lista de espera, se prevé que sobre el año 2050 o así te tocaría entrar, aunque por supuesto si eres alguien con el suficiente rango, entrar entraras, te lo puedo asegurar… pero es que así es la vida, así que mejor dejemos la basurilla para otro momento y mejor una sonrisa, ahora estamos caminando. Y si quieres ver la copia de las cuevas, nada que ver desde luego, ahí tendrás ya quizás más suerte, pero eso si, compra las entradas con tiempo, porque si piensas hacerlo el día que llegues pues seguramente tengas que volverte por donde has venido, así que paciencia siempre, respirad profundo y sonreír, no os olvidéis de sonreír. Por supuesto no voy a poner fotos de ese lugar porque ni me acerqué, ya que está bastante alejado del pueblo y estuve hace años.
Pero eso si, no pasa absolutamente nada, puedes pasear por las calles de Santillana, declarado el lugar como “Conjunto Histórico Artístico” ya en 1889…




y estar considerado como uno de «los pueblos más bonitos de España», con sus calles empedradas de aspecto medieval, así que si lo deseas déjate envolver por su encanto, dada su catalogación, lo que le convierte en uno de los lugares más visitados y atractivos de la región, donde visitar entre otros lugares su Colegiata de Santa Juliana…











…un templo dedicado a la mártir cristiana ajusticiada en el siglo III D.C, durante el reinado del emperador romano Diocleciano. Los orígenes de este templo, aunque ya había restos de tiempo más atrás, se inician en el siglo IX, cuando unos monjes levantaron una ermita para depositar los restos de Santa Juliana, donde luego monjes benedictinos levantarían un monasterio, adquiriendo su titulo de Colegiata en el siglo XI, renovando en el siglo XII el lugar levantando un templo de estilo románico con elementos del protogótico primero y gótico después, por lo que se percibe esa mezcla entre los diferentes estilos arquitectónicos. Es una bella estructura que sigue el modelo de la arquitectura del Camino de Santiago, y donde para mi al menos la parte más destacada del conjunto es el claustro, una VERDADERA maravilla de finales del siglo XII, impecablemente conservado con sus cuarenta y dos capiteles románicos ¡ME ENCANTA A RABIAR ESE MARAVILLOSO CLAUSTRO!. ¿Veis? quizás no puedas ver las cuevas, pero puedes disfrutar de otro arte igualmente bello y totalmente digno de ser contemplado y admirado, al menos yo así lo considero.
Y también callejeando puedes ver también el Convento de San Ildefonso (siglo XVII) donde habitan en clausura las Hermanas Clarisas…

que elaboran dulces típicos y artesanos realizados por ellas mismas y que venden a través del torno del convento, ya que a ellas nunca las ves. Y también te encontraras con la Casa del Águila, la Torre del Merino, el Palacio gótico renacentista de los Velarde, el Museo Diocesano Regina Coeli…


edificio del siglo XVI, en estilo herreriano, que conserva, estudia y expone arte sacro en un pequeño museo, asequible por su precio, así como otras casas nobles más y palacetes bien conservados, e incluso entre varios y diversos pequeños museos hasta el pequeñín museo-jardín-exposición que llaman Museo Altamira Mitológica que consta de algunas estatuas, esculturas y representaciones de personajes mitológicos de la zona cantábrica como la Anjana, la Sirenuca, el Ojáncano, el Caballito del Diablo, la Viejuca de Vispieres, el Trasgo, el Jentirujo, el Culebre, el Musgoso, la Guajana, los Diablillos de Galia, el Ramidrejo y alguno más. La entrada cuesta cuatro euros, precio quizás algo excesivo para lo pequeño y escueto que es y lo que ofrece, pero bueno, ahí lo tienes como posibilidad si lo deseas, con sus virtudes y defectos, aunque avisados quedáis de ello.





Y terminamos el día, un día más en este mundo cambiante, donde ya sabéis que hay que aprender a vivir en todo y con todo, sin perder la cabeza con promesas ni vender la vida por un plato de habas en medio del acierto y del desconcierto, mientras miramos para arriba para creer que mañana siempre será otro día y que lo que esta roto formará con sus trozos nuevas cosas. Al igual que no arrastrarse en el que dirán o que harán, porque siempre dirán o harán lo que quieran, ante lo cual siempre es importante el poder moverse entre las sombras sin formar parte de ellas, no deseando ser nadie que no seas tú, donde si algo lo deseas tanto, aprende, no hay limites y quizás lo consigas…
OS DESEO LO MEJOR, ASÍ QUE CUIDAROS MUCHO, SED FELICES Y ¡¡BUEN CAMINO SIEMPRE!!
Muy bonitas imágenes Fran, disfruta mucho de ese Lebaniego
Gracias, Franki, excelente camino aunque durillo ¡Buen Camino siempre!
Buen Camino siempre
¡Buen Camino siempre, my friend Mike!
Muy bonito Fran, disfruta mucho
Ten por seguro que si, Juanvin ¡Buen Camino siempre!
Muy detallado como siempre, disfruta mucho amigo.
Gracias, amigo mío ¡Buen Camino siempre!
Disfruta de ese Lebaniego amigo, ya te escuché en el podcast!
Gracias por tus deseos y por escucharlo, Juan ¡Buen Camino siempre!
Precioso y muy instructivo Fran Lucas, me lo guardo !!
Gracias Roberto, todo tuyo ¡Buen Camino siempre!
Que bien describes las situaciones y los lugares Fran, haces tán fácil visualizar todo con palabras.
Buen camino
Gracias, amigo Rafa, intento transmitir siempre lo que siento ¡Buen Camino siempre!